El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha prohibido que se debilite el cifrado seguro de extremo a extremo, lo que afecta directamente a los planes de vigilancia masiva de la Unión Europea.
Esta sentencia es importante porque salvaguarda la intimidad y la seguridad de las personas al garantizar la protección de sus comunicaciones cifradas.
La decisión pone fin de hecho a las intenciones de la UE de aplicar medidas de vigilancia generalizada.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha dictaminado que obligar a las personas a descifrar las comunicaciones cifradas vulnera su derecho a la intimidad.
El tribunal también expresó sus dudas sobre la idea de debilitar el cifrado para todos los usuarios.
Esta sentencia puede tener implicaciones para el proyecto de ley de seguridad en línea del gobierno británico, que pretende regular las plataformas en línea.
Los gobiernos pueden suspender temporalmente el derecho a la intimidad en situaciones de emergencia.
El debate incluye temas como la soberanía parlamentaria, la necesidad de una constitución escrita, la revisión judicial, el poder del Tribunal Supremo y la influencia del Derecho internacional y de la UE en los distintos países.
El debate también aborda la relevancia de la encriptación, la jurisdicción del Tribunal Europeo de Derechos Humanos y el equilibrio entre privacidad y cumplimiento de la ley.